20 cosas importantes 20

A mis amigos: este es un pequeño informe de lo que NO debemos hacer cuando tenemos sexo, es una pequeña recopilación que a lo largo de mi mediocre campaña en el arte amatorio he ido almacenando, digamos que hablando en términos del fobal soy como Rosario Central, a veces con excelentes campañas y hasta logré salir campeón, otras me fui al descenso - ambas las menos - pero la gran mayoría en la mitad de la tabla. Soy capaz de ganarle al mas pintado... en este caso a la mas pintada y perder con Deportivo Paraguayo de local.

A mis amigas: lo que acaban (perdón por el término) de leer puede que les haya sucedido o quizás no, pero seria sumamente interesante que desde su punto de vista estrictamente femenino nos hagan saber en que otras cosas nos equivocamos.

Tomemos esto como un trabajo científico que apunta a una mejor convivencia horizontal.

1º) De los besos: evitar los besos en una relación pre-erótica es como no ligar nunca el 7 de oros en la escoba de 15. Mis queridos, evadir los labios de la mujer y lanzarse tipo Jaques Cousteau a bucear directamente a otro lado no es de campeones y hacemos sentir a nuestra compañera como si la hubiéramos asaltado a mano armada.

2º) de apretones, apretujes y apretujones: cuando tomemos el seno, pecho, busto, teta o goma - son válidas todas las denominaciones - de una mujer en tus manos, no actuemos como ama de casa en el super probando melones, tampoco cometamos el error de apretar como si se tratara de una pelota de fobal Nº 5 antes de empezar el picado. Suave... suave... SUAVE les dije!!!

3º) De los timbres: ¿Quién nos dijo a los hombres que morder con fuerza un pezón es algo estimulante? ¿Te gustaría que te mordieran un testículo? Hay caricias que un hombre hábil puede hacer con los dientes y lengua, pero específicamente me refiero a esas mordidas que pareciera que quieren desinflarlas ¡Ah…la pelotita! tampoco juegues tanto con los pezones entre tus dedos como tratando de sintonizar sólo Dios sabe qué radio de FM, o dándole cuerda al viejo reloj de bolsillo del abuelo. En síntesis: seamos sutiles...no cuesta nada.

4º) De ignorar otras partes del cuerpo femenino: una mujer es algo más que tres partes del cuerpo que por razones obvias no voy a enumerar. Por si no lo sabían, hay áreas en el cuerpo de una mujer que son ignoradas tan frecuentemente, así como las rodillas y la parte de atrás de los muslos, dentro de muchas más que todas las mujeres tienen repartidas en el cuerpo (en TODO el cuerpo... lee bien zapallo). En conclusión: si no tenemos paciencia para recorrer el paisaje corporal de una mujer mejor pasemos por la góndola del super anexo carnicería y con una bandejita de ubre, otra de nalga o colita de cuadril y una mas de peceto al cual debemos mechar; un golpe de microondas y listo... qué tanto joder!!

5º) De el arte de sacar/se la ropa: la destreza manual a veces echa a perder toda la parte previa de alto voltaje erótico ( en caso de duda ver punto 1º) y aun mas cuando queremos repetir lo que probablemente vimos en una película de Rocco Siffredi. Si no podés desabrochar corpiños o los botones de la blusa o el del algún jean rebelde y ni hablar de querer jugar a la cenicienta y en este caso sacar sandalias, zapatos y/o botas y por que no también zapatillas no dudemos en preguntarle a ella; es muy probable que nos ahorremos un momento de vergüenza. Eso de estar besando y con un ojo entreabierto tratando de hacer zafar la prenda a quitar no queda nada bien ante los ojos de la dama. A ninguna mujer le gusta sentirse estúpida y vaya que se siente una estúpida cuando intentamos sacar una blusa, remera, polera, sweater y se le atoran en la cabeza y queda una como cebolla. Debemos aprender a desvestirlas bien. No olvidemos que corremos serios riesgo de romper botones y ni hablar de prendas o medias de nylon y ahí se pudre literalmente todo, la señorita o señora entra a pensar más en como carajo sale del telo o que dice en la casa al llegar que en lo que estaba dispuesta a hacer. Esto es válido si se tratase de la esposa (de otro) y/o novia (nuestra o de otro). En caso de sentirse incapacitado en sacar la ropa de su oponente con sutileza es preferible jugar con la ropa a medio poner.

6º) De los regalos no deseados: como somos machistas los preservativos son de nuestra exclusiva responsabilidad. Compralos, llevalos y tiralos al inodoro después de usarlos. No le encargues a ellas esos menesteres. Ponete a pensar que actitud tomaríamos los machos argentos si nos pidiesen que vayamos a un super y/o farmacia a comprar tampones o toallas femeninas con o sin perfume, con alas o nocturnas.

7º) De la acción por episodios: las mujeres, a diferencia nuestra, no recomienzan donde las cosas se quedaron ¡Si! detenés la acción una vez iniciada, tendrás que regresar al punto inicial - es como el juego de la oca - avanzas o retrocedes casilleros según tu performance.

8º) De quitarse los pantalones antes de tiempo: la vista de un hombre en medias, slip o boxers no es exactamente lo mas sexy del mundo eh? Una regla de oro es sacarse las medias, no cumplir con esta premisa es literalmente fatal porque del ridículo no se vuelve.

9º) De la alta velocidad: cuando llegues a la afortunada situación y empiece la acción, lo peor que puedes hacer es comenzar a serruchar como si estuvieras en la carpintería del barrio; seamos sutiles ¡¡Suavidad por favooooor!! A lo mejor después de un rato ya le imprimís un poco de velocidad pero no todo el tiempo. Hacer el amor es como manejar el auto, hay que poner primera y arrancar, despacito ir metiendo los cambios conforme al ruido del motor variarle las velocidades. Tengamos en cuenta que hay veces - como en las carreras del TC - no hay nada más excitante que un rebaje o simplemente regular hasta decidir para que lado pinta la curva.

10º) De los finales precoces: este es probablemente el temor más grande del macho argentino y siempre - indefectiblemente - luchamos contra ese fantasma que nunca sabemos en que momento se nos aparecerá. A veces coincide con la llegada de las facturas de los servicios, otras por rara razón de la naturaleza, llega sin motivo aparente. En este caso es preferible tener en mente un plan B porque es bueno recordar que a las mujeres tampoco les gusta quedarse a la mitad del río con los remos en la mano.

11º) De los finales eternos: muchos hombres llaman aguante a darle y darle sin visualizar un horizonte cercano. Si sos de los hombres maratónicos, conviene que pegues algo interesante en el techo para que tu pareja tenga en que entretenerse mientras vos tratás de que ALGO acabe. Hoy en día el Infoabe viene con un suplemento para la mujer de lo más entretenido.

12º) De las piruetas: el Kama Sutra es una cosa, el Circo Sarrasani es otra. ¡No pienses que la mujer que esta con vos es contorsionista porque lo único que vas a lograr es que te mire con la cabeza de costado y emita un leve comentario letal como ¿Se puede saber que carajos querés hacer? Recuerden que la mujer es un bicho raro que se hace la perra a la hora del coqueteo pero después pretende o ser mas perra (cosa que puede acarrear lumbalgias y moretones varios) o se puede arrugar como nunca en la pregunta ¿A vos te parece que YYOOOO voy a hacer eso?, cara de QUE me viste? (como si los hombres miraran la cara de las mujeres a la hora de elegir partenaire de la vuelta del perro).

13º) De los mordiscones: es algo sumamente erótico el practicar suaves y delicados besitos en el cuello o de lugares sensibles del cuerpo femenino. Pero no se zarpe que a ninguna les gusta andar con los horribles chupones como si las hubiese raptado Drácula.

14º) De las órdenes y el tono de voz: No mutes a un dictador gritando instrucciones sexuales. La cama no es un campo de concentración, y si querés algo específico pedilo pero acordate que hay maneras y maneras de pedir.

15º) De los aplastamientos: por lo general, los hombres pesamos mas que las mujeres, así que si jugando al misionero ves que en lugar de experimentar un orgasmo se comienza a poner morada o azul cambiá urgente de postura o tené a mano el numero de alguna emergencia médica.

16º) De los agradecimientos: nunca le des las gracias a una mujer por haber hecho el amor. Agradecé que te den un poco de sopa o un café pero nunca una sesión de buen sexo, sería como pagarle con tarjeta de crédito por lo que acaban de hacer.

17º) De las miradas: nunca se olviden de mirar a los ojos y sonreír de vez en cuando, hacer el amor es como bailar, a uno no le gusta andar bailoteando con un señor caracúlico que vaya a saber una porque esta tan serios. El periplo amoroso es como un lindo vals o rock and roll; también se puede comparar con la sensación de las hamacas o el triciclo a full por el caminito de piedritas de la plaza.

18º) De los tirones de orejas: nunca pero NUNCA nunca de los nunca jamases la orejeen como al ancho de espadas o tironeen de la nuca con la excusa de yo te ayudo o me gusta acompañar tu movimiento de cabeza y esas pavadas que hacen que la señorita se sienta que se atora y vomita en la primer tocada de campanita de ESA parte del señor en cuestión.

19º) De las preguntitas: los machos argentos se bancan con estoicicidad la pregunta ¿Te gustó? o ¿La pasaste bien? Deberán responder con una caricia en la panza y una sonrisa. Al menos si no les gustó queden bien con poco.

20º) De los tiempos necesarios: sugieran, ayuden, lleven, guíen o déjense llevar por las extravagancias de la señora/ita. Todo es permitido, hasta las pretensiones de dormir cucharita. Excepto que no la quieran ver nunca mas en sus vidas, no la saquen con el pelo mojado del telo; denle tiempo a que se acomode y mientras tanto al menos demuestren interés cuando se acomoda la facha en vez de darse vuelta a mirar el partido. A las mujeres les gusta que las miren mientras hacen morisquetas frente al espejo, tratan de llevar la celulitis con honradez y altura frente a un señor que bosteza como hipopótamo 2 metros mas allá y les mira el terremoto en el trailler como con cara de post guerra. Esfuerzo estoico si los hay es el tratar de que todo lo que disimuló el push-up, el jean un poco mas justo que sostenía todo en su lugar, el maquillaje tapando las patas de gallo no decaiga en tan sólo dos segundos (que es lo que tardan en ponerse verticales y caminar hacia la ducha con las luces prendidas)


Consejo de amigo

A todos aquellos que dicen esta mina está mejor vestida que en bolas les presento el desafío - tal vez mas jodido que el de Blanco ALA - de tratar de mirarse la punta de los pies estando parado derecho - no haga trampa o será descalificado, no solo por gordo, sino por tramposo - Si ud todavía es de esos que apenas entornando los ojos al sur ve sus hermosos dedos gordos de los pies, se ha ganado un turno extra (o un desayuno, hable con el gallego de la caja).
Por lo recuerde ante todo ser noble, la señorita/señora que está a su lado puede ser la última mina que vea en bolas en su vida. A la salida del telo lo puede pisar un camión o lo encuentre su esposa -para el caso es lo mismo.

Nota del Cajoncito: este escrito me fue enviado por mi amigo personal Fernando - más conocido como El Patasucia - y el Cajoncito se tomó el atrevimiento de editarlo un cachito nomás, bah.. la puntita.